25 de enero de 2009

12:08

La noche transcurre sin premura, luego de un día exótico de hacer pre ruta, me encuentro sin esperarlo con mi amiga la rubia ex de mi vecina, después de abrazos y besos de amistad me demuestra, teléfono en mano que justo me ha llamado esta noche, yo le digo, que he dejado el teléfono en la cartuchera del carro de mi madre y veré su llamada mañana a las 4:30, cuando haga la ruta a la hora que es.

Nos entramos al lugar franciscano y nos ponemos alrededor de la mesa a cenar, como contenta y luego paso al billar, jugamos un rato y me hago dos que me hacen feliz, bajamos a la rumba y la pasamos bombi, al rato antes de las 12, por lo de la madrugada, llegamos a casa.

Para broche de oro, mi amiga saca al monstruo mientras yo escribo esto, noche feliz, de un día feliz.

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