se llegó al fin el día de volar y así lo hicimos, salimos de casa caminando para sacar platita de la máquina y changos, se me había quedado la tarjeta, taxi, parada y aeropuerto, desayuno estafador en un chuzo del puente aéreo, cuando ví las cerezas ensartadas en el queso, dije a como cada una, como las del helado en otro lado.
la banda de la maleta en Leticia funcionaba a trancas y mochas, pero ahí llegó el morral, y salimos caminando divertidas y emocionadas, a medio camino nos cayó una pomarosa encima, nos saludaba la selva con sus frutos, entre si la comíamos o no, terminamos conversando con e, que resultó dueño de una posada llamada hipiilandia, llegamos en tuk tuk, regio el cuarto, fuimos a visitar a las amigas kirpalameñas... toda una historia la foto en tabatinga, los helados de copoazu, en una hora... tres paises, muchas fotos.
los pájaros en el parque santander al atardecer hermosos, el sonido, el movimiento, la cena en el veg... malaa, la cerveza luego en su punto y el día siguiente caminando por aquí y por allí con los pantalones a medio romper, (recién comprados) y la pulsera perdida días más tarde.
almuerzo peruano (muy famoso por lo rico) y desfile de carrozas por las colonias en la ciudad viviendo, la noche en cama, dichosas.
el paseo en bote por las comunidades super lindo primero loma linda, donde saludamos la ceiba y entramos en la selva por primera vez, las victorias regias, yo enterrada en las arenas movedizas, toda embarrada, conocimos un montón de plantas, un montón de frutos, la fariña y su proceso, luego la noche en el vergel, paranóica por la actitud del francés frente a las niñas...
entonces sentir y entender de algún modo primitivo y mental el tráfico, de gasolina, de personas, de drogas, estas en un punto privilegiado para un montón de cosas pero te das cuenta de la mano del humano en ellas y entonces con lagrimas en los ojos fui pensando mucho... en muchas cosas.
plantas insectos, ranas, monos, pájaros, peces, delfines, de todo un poco, la pesca fue escalofriante y saludable teniendo en cuenta el primo de piraña que mató la ricurita, al agua patos en el lago tarapoto fue hermoso liberador, atardecer de antología.
y la conciencia ecológica, alborotada en los altos del águila, en su cabaña campestre en sus sonidos en su vida hecha dicha de cada día, en el museo de puerto nariño, en puerto nariño.
volver fue vertiginoso y alucinante, recibir la ensaladera de manos de su artista, volver loca del sueño, demasiada vida junta, un encuentro con la naturaleza a niveles alucinantes, tanto, tan, tan, que pierdo el aliento y luego las confesiones, con la amiga de los años, preparar la comida, volver a la realidad, escribir cuentos sobre todos esos tiempos y estos tan distintos.
el encuentro con m, kármico, de cerrar ciclos y la despedida de la ricurita en la sala de espera, una tormenta que atribuyo a mi luna, en casa, empezar a lavar la ropa sucia, empezar a entender el mundo de otra manera, salir a buscar laburo y tal vez, encontrarlo...
extrañar a la ricurita.
¡miss amazonas!
