20 de marzo de 2013

entonces paso el 10 y ya es 20

pasó el 10 y sigo sin celebrarlo del todo, una mezcla de sentimientos se apoderó de mi de tal modo que creo que me dio muy duro eso de los 40, con la cabeza llena de rayitas blancas, con mil achaques y la gripa esta que todavía me tiene tosiendo y botando flemas.

Ya me subió el ánimo una nena que dijo, entre chiste y chanza que si yo no había hecho nada con mi vida, que podían decir los que de verdad no habían hecho nada y pues me parece que alguna razón trae y como el poema de buseta siempre hay gente mas grande y mas pequeña que una...

yo he vivido en muchos lugares, ninguno propio, he conocido muchos de otros y me he delietado con amaneceres y atardeceres de ensueño e irrepetibles desde la ventana de mi cuarto hasta el mas recondito pedazo de país o de mundo, según corresponda, me he enamorado con la cabeza y con el corazón y he tenido roto el corazón y vuelta loca la cabeza por mujeres a las que quiero olvidar y recordar por siempre, he bebido hasta abrazar la taza del baño mientras los pajaritos cantan y me he bañado vestida y empelota, sola y acompañada en las más dispersas aguas.

he laburado en lo que he querido, incluido el trabajo que ahora tengo y que a los 5 años era lo que quería hacer... me encantaban los carros que aún hoy me encantan, con su velocidad y su grasa; he bailado hasta caer sentada y me he quedado sentada viendo bailar a otras, he muerto en furias irracionales y me he reído de iracundos tontos e irracionales que a veces se me cruzan y me dan risa.

he sido lo que la vida ha hecho de mi y no me arrepiento de nada, mas que de el hecho de a veces dormir demasiado y ni tanto tampoco, porque es lo que pide el cuerpo aunque otros digan que habrá tiempo cuando venga la parca.

a parca la espero con gusto porque hoy, aquí donde estoy sentada no tengo nada que me anime más que la respiración que sigue allí su cause, hasta cuando se acabe... supongo que meditar es lo que sigue y que el gordo tenga la bondad de llevarme a mi destino como decía su santo... caminando.

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down town abbey en tarde lluviosa de sábado

Hace raaato no me daba una tarde de sábado como la de hoy, con ginger y papitas de paquete, me he vuelto más juiciosa para comer, sobre todo...